PENSANDO LATINOAMERICANO: VÃctor Hugo Morales: Netanyahu quiere apoderarse de Palestina

viernes, 3 de septiembre de 2010

VÃctor Hugo Morales: Netanyahu quiere apoderarse de Palestina

VÃctor Hugo Morales: Netanyahu quiere apoderarse de Palestina

03-09-2010.- El esfuerzo de Palestina no cuenta con la aprobación del sionismo, porque la posición de Netanyahu, que es un enemigo de Palestina, es apoderarse definitivamente de sus tierras con los asentamientos.

La afirmación la hizo el presidente del Comité de Solidaridad Internacional, Cosi, Víctor Hugo Morales, durante la celebración del Día Internacional del Quds (Tierra Santa), evento realizado este viernes en la Plaza Bolívar de Caracas.

“No puede haber paz en Palestina sino se cumplen todas las condiciones como son el regreso de los refugiados, la libertad de los prisioneros, levantar el cerco de Gaza y que conduzca todo esto a la autodeterminación y la constitución de un estado Palestino independiente y soberano”, aseveró Morales.

Por su parte el Embajador del Estado de Palestina ante la República Bolivariana de Venezuela, Farid Suwwan, aseguró que no habrá paz ni justicia en el Medio Oriente sin la soberanía y la independencia del pueblo palestino.

“Jerusalén como ciudad sagrada para todas las religiones cristianas, judías y musulmanas tiene que ser respetada y tener plena libertad religiosa y tiene que ser recuperada, porque no puede ser dominada ni controlada por el sionismo del estado de Israel”, señaló Farid Suwwan.

Manifestó su satisfacción porque el pueblo Palestino y los pueblos árabes estén hermanados con el pueblo venezolano en la lucha por la libertad, igualdad, independencia y la soberanía. “Aquí tenemos un apoyo incondicional, absoluto y pleno por parte del pueblo venezolano y especialmente del presidente y comandante Hugo Chávez”, expresó Suwwan.

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"no dare descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma"...

"En 1805 por los senderos accidentados de una Italia que todavía no es Italia". Con tan solo 21 años, acompañado de su maestro Simón Rodríguez, bajo las ruinas de Roma en el Monte Sacro, el mismo sitio donde "el pueblo romano luchó por suprimir la esclavitud por sus deudas". Simón de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios anuncia su profecía:

"Conque éste es el pueblo de Rómulo y Numa, de los Gracos y los Horacios, de Augusto y de Nerón, de César y de Bruto, de Tiberio y de Trajano? Aquí todas las grandezas han tenido su tipo y todas sus miserias su cuna. Octavio se disfraza con el manto de la piedad pública para ocultar la suspicacia de su caracter y sus arrebatos sanguinarios; Bruto clava el puñal en el corazón de su protector para reemplazar la tiranía de César con la suya propia; Antonio renuncia los derechos de su gloria para embarcarse en las galeras de una meretriz; sin proyectos de reforma, Sila deguella a sus compatriotas, y Tiberio, sombrío como la noche y deprevado como el crimen, divide su tiempo entre la concupiscencia y la matanza. Por un Cincinato hubo cien Caracallas. Este pueblo ha dado para todo: severidad para los viejos tiempos; austeridad para la República; depravación para los Emperadores; catacumbas para los cristianos; valor para consquistar el mundo entero; ambición para convertir todos los Estados de la tierra en arrabales tributarios; mujeres para hacer pasar las ruedas sacrílegas de su carruaje sobre el tronco destrozado de sus padres; oradores para conmover, como Cicerón; poetas para seducir con su canto, como Virgilio; satíricos como Juvenal y Lucrecio; filósofos débiles, como Séneca; y ciudadanos enteros, como Catón. Este pueblo ha dado para todo, menos para la causa de la humanidad: Mesalinas corrompidas, Agripinas sin entrañas, grandes historiadores, sibaritas desenfrenados, aquilatadas virtudes y crímenes groceros; pero para la emancipación del espíritu, para extirpación de las preocupaciones, para el enaltecimiento del hombre y para la perfectibilidad definitiva de su razón, bien poco, por no decir nada. La civilización que ha soplado del Oriente, ha mostrado aquí todas sus faces, ha hecho ver todos sus elementos; mas en cuanto a resolver el gran problema del hombre en libertad, parece que el asunto ha sido desconocido y que el despejo de esa misteriosa incógnita no ha de verificarse sino en el Nuevo Mundo ¡Juro delante de usted; juro por el Dios de mis padres; juro por ellos; juro por mi honor, y juro por mi Patria, que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hasta que haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español"(citado por Britto García, 2010: 51-52)