Páginas

jueves, 28 de julio de 2011

Alan García rompe tradición en asunción de Humala; dijo que buscaba evitar ser "maltratado''

28 de julio 2011.-El saliente mandatario Alan García rompió la tradición de asistir a la ceremonia de asunción del nuevo presidente al entregar el jueves la banda presidencial antes de abandonar el Palacio de Gobierno.

García, de 62 años, se despidió de sus ministros y de algunos de sus ex ministros en el patio principal de Palacio de Gobierno, se despojó de la banda presidencial que entregó a un edecán militar, y abordó una camioneta negra de vidrios polarizados que lo llevó con rumbo desconocido.

Es tradición en los cambios de mando en Perú, que el presidente que deja el gobierno acude al Congreso, donde entrega la banda presidencial, y pronuncia un discurso de despedida poco antes que su sucesor sea investido como nuevo mandatario.

García había anunciado que no asistiría a la ceremonia de asunción de su sucesor Ollanta Humala, y negó que constituyera un "desaire'' sino que dijo buscaba evitar ser ``maltratado'' como en 1990, cuando al concluir su primer gobierno (1985-1990) fue abucheado en el legislativo.

En ese entonces, García dejaba el país sumido en una profunda crisis económica con hiperinflación de cuatro dígitos, generada por una serie de medidas populistas y por su decisión de enemistarse con los organismos financieros multilaterales al declarar la moratoria de la deuda externa.

En 2011, García deja una economía vigorosa, con un crecimiento de 7% en promedio anual, inflación menor al 3%, y reservas internacionales por más de 47.000 millones de dólares.

Sin embargo, en las últimas semanas arreciaron las críticas de sus oponentes que le acusaron de haber gobernado sin sensibilidad social.

El miércoles en la noche, García dirigió su último mensaje al país, trasmitido por televisión, en el hizo un breve balance de su mandato y agradeció a los peruanos por haber hecho posible un crecimiento de la economía peruana sin precedentes en los cinco años de su gestión.

Además afirmó que "nunca dejé de tener afecto por los más humildes'', y pidió perdón a quienes pudieron haberse sentido ofendidos "por mis palabras o mis hechos''.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario